Cómo controlar tu postura corporal para transmitir a los que te rodean aquello que quieres
Como ya hemos comentado por aquí, las personas somos seres sociales y tenemos que tratar a diario con otra gente. Por otra parte, no podemos no comunicar. Aunque no digas nada, tu cuerpo, tu atuendo y tus gestos hablan por ti. Con la postura corporal anuncias energía, optimismo, segurada, confianza…o lo contrario, cansancio, hastío, abatimiento…Tu postura depende de varias variables, como tu personalidad (aquellos rasgos que te definen), el estado afectivo/emocional en el que te encuentres, la educación que te han dado o el grado de familiaridad de las situación. Por la forma de andar o simplemente de estar de pie puedes detectar en los demás falta de interés, decepción, tristeza (emociones asociadas a la depresión) o hiperactividad, nerviosismo, dificultad para relajarse (más asociadas a problemas de ansiedad).
Por ejemplo, notarás que cuando estás cansado o triste tu cuerpo se repliega sobre sí mismo, el pecho se mete hacia dentro, te mueves con lentitud, arrastrando los pies. Ten en cuenta que los demás pueden percibir lo que sientes solamente con echarte un vistazo, pero tú tienes el control sobre lo que transmites con tu cuerpo, sobre los mensajes emocionales que envías. En cuanto a la postura, es aconsejable que trabajes los siguientes aspectos: tu verticalidad, apertura, simetría y estabilidad. Para mantener una postura vertical, imagina que desde la parte superior de tu cabeza sale un hilo que llega hasta el techo y te une a él. En cuanto a la apertura, nos fijamos en el tronco; abre el pecho, relaja los hombros, pon la cabeza en posición vertical. La simetría es equilibrio, así que imagina un eje que divide tu cuerpo en dos de forma vertical, así darás sensación de estabilidad y seguridad. Lo simétrico nos sugiere orden, estabilidad, control…En lo referente a la estabilidad, pon tus pies en paralelo, ligeramente separados y firmemente apoyados en el suelo. Adopta esta posición como tu postura natural y a la vez que te aporta seguridad en ti mismo y confianza, eso mismo es lo que transmitirás hacia el exterior.
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