Cuesta de Enero.

Cuesta de Enero.

¡Empiezan las rebajas! Sí, es cierto. ¿Pero necesitas comprar algo? Esta es una pregunta que deberíamos hacernos antes de sumergirnos en alguno de los centros comerciales que nos rodean.

El acto de la compra compulsiva puede esconder tras él problemas de ansiedad o incluso depresión, pero muchas veces aparece sin estar apoyado en ningún trastorno. Al fin y al cabo, todos hemos recurrido en alguna ocasión a irnos de compras cuando estamos bajos de ánimo. El verdadero conflicto surge cuando este comportamiento se realiza de manera habitual.

Pero no dramaticemos más de lo debido, tan solo queremos plasmar aquí unos cuantos consejos que te sirvan para evitar más gasto del debido durante estos días. Ahí van.

  1. El primer consejo ya lo hemos comentado anteriormente. Pregúntate qué necesitas comprar. Puedes hacer una lista con lo necesario y otra con lo que solo es un capricho. Es importante que las tengas en cuenta cuando vayas de compras.
  2. Marca desde el principio cuánto dinero quieres gastarte y pase lo que pase, no sobrepases esa cantidad.
  3. La compra compulsiva tiene una satisfacción inmediata y, además, poco duradera. Por eso, cuando te estés debatiendo entre el sí y el no, piensa en cómo te sentirás al día siguiente de comprarlo (cuando te arrepientas de haber gastado innecesariamente), no justo después de la compra (que te sentirás bien, pero por poco tiempo).
  4. No compres inmediatamente. Si ves algo que te gusta, no te lances. Sal de la tienda, date una vuelta, espera media hora y luego vuelve a por el objeto preciado. Seguro que el deseo de compra habrá disminuido.
  5. En vez de pensar cómo estarás teniendo en tu poder el objeto que deseas, imagínate cómo estarías sin tenerlo. Tardarás poco tiempo en darte cuenta de que no es tan necesario como en ese momento tu cabeza se empeña en hacerte creer.

    Psicox, tus psicólogos en Bilbao.

Cuesta de Enero.

Etiquetado en: